viernes, 28 de octubre de 2011

La Esperanza Cubana (1ª Parte)

La Esperanza Cubana, Zocueca, Jaen (Foto, AFM, 2011).


En las faldas de Sierra Morena, entre los olivares de Zocueca, hay una fábrica de aceite llamada La Esperanza Cubana, para asombro de los viajeros que van por la carretera de Andalucía. Recuerdo la alegría que siempre me ha dado verla y cómo, cada vez que iba a pasar de nuevo por allí, me ponía a buscarla con la mirada, sólo pendiente de ella, hasta que por fin podía disfrutar de su aparición con verdadero regusto. Entonces, como si hubiera dicho un ensalmo mágico, el cerrado orden de los olivos se me hacía manigua por unos instantes y me ponía a imaginar cosas de  Cuba, hasta que luego, al seguir el camino, el ensueño se desvanecía.

La Esperanza Cubana fue una de las muchas inversiones que hizo el hacendado criollo Antonio Vinent Gola, V marqués de Palomares de Duero, al poco de venir de Cuba en 1869. La mandó construir en 1871, en una parcela de media hectárea que compró en Zocueca, una pedanía de Guarromán, sobre las ruinas de una vieja venta que allí había, junto al rio Rumblar, cerca de Bailén. Tiene tres edificios, uno más grande, donde estaba la fábrica de aceite y la residencia del dueño y del capataz, otro con la vivienda de los trabajadores, y el más pequeño y algo más retirado para la cría de ganado de cerda; es lo que en Jaén llaman un cortijo aceitunero  o casería, donde era  costumbre que el dueño viviera durante la época de recogida de aceituna. La Esperanza Cubana ha estado funcionando como fábrica de aceite hasta no hace mucho tiempo, y en la actualidad pertenece a Cerámica Malpesa, que la rehabilitó en el año 2002 para establecer en ella su sede, construyendo a su lado  una fábrica de ladrillos y adoquines.

Cuando se hizo La Esperanza Cubana el olivar jiennense había crecido mucho, debido a la gran demanda que había de aceite de oliva y al alto precio que llegó a alcanzar. La mayor parte del aceite que producía la provincia no se dedicaba al consumo, sino a uso industrial como lubricante, a fabricar jabón y al alumbrado. Pero esta situación cambió poco después, ya que la caída de precios de los productos industriales que se produjo con la gran depresión de 1873, junto al creciente desuso del aceite de oliva como lubricante industrial y como combustible  para alumbrado, dio lugar a una gran reducción de su precio, lo que obligó a mejorar su calidad para orientar la producción a un mayor  consumo humano, y poder competir a su vez con el aceite de oliva italiano y con el catalán, que eran mejores.

La escasa calidad gastronómica que tenía entonces la mayor parte del aceite de oliva andaluz era debida a diversas causas, pero sobre todo a la lentitud de la molienda, pues el volumen de las cosechas era muy superior a la capacidad de sus almazaras y la aceituna se amontonaban en las trojes durante mucho tiempo, provocando su fermentación y la consiguiente acidez del aceite. Esto se resolvió aumentando el número de fábricas y modernizando su equipamiento. La Esperanza Cubana fue pionera en este sentido, ya que fue dotada de rulos y  prensas hidráulicas con una máquina de vapor, lo que permitió acelerar notablemente el proceso de molturación.

Pero el marqués de Palomares de Duero apenas pudo disfrutar de su cortijo aceitunero, pues murió en febrero de 1872, tres años después de volver a España. Se había instalado en Sevilla, donde su yerno Antonio Halcón Mendoza,  casado en Cuba con su hija Elisa, le había preparado una vivienda, aprovechando que se fue a vivir a esta ciudad cuando terminó su destino ultramarino como coronel de ingenieros, en 1865. Por encargo de su suegro, compró entonces parte del que fue el palacio sevillano de los duques de Medina Sidonia, asolado tras la invasión napoleónica, sobre cuyo patio principal y crujías se construyó la nueva casa, respetando en lo esencial su carácter histórico. De este viejo palacio de los Guzmanes, como también se le conocía por haber sido Guzmán El Bueno su primer propietario, se mantuvo la fachada neogótica de doble planta hacia la plaza del Duque, así como el torreón esquinero, restaurando artesonados, puertas y yeserías, y el hermoso jardín con su estanque; entre las piezas más logradas destacaban el patio con arcadas de medio punto sobre columnas genovesas de mármol de Paros y la solemne escalera. El deseo del marqués de Palomares de Duero de adquirir una casa en Sevilla con un patio tan grande que permitiera entrar y dar la vuelta a un coche de cuatro caballos al trote, se vio cumplido con esta mansión, en la que se instaló confortablemente con su numerosa familia, entre ricos muebles, alfombras, cortinajes y abundante plata labrada.

Siete años después del fallecimiento del marqués, esta casa-palacio fue adquirida en subasta por Juan Antonio Fernández de la Riva, que la convirtió en los Almacenes del  Duque. En 1964, tras ser ofrecida sin éxito a varias instituciones públicas, la compró el conde de Bardeau, para ser finalmente derribada en 1965 junto al colindante palacio de los Sánchez-Dalp y colegio de Alfonso X el Sabio, y construir en su lugar una sucursal de la cadena de grandes almacenes El Corte Inglés, presidida desde 1966 por Ramón Areces, que a su vez había emigrado a Cuba de joven, donde aprendió su oficio en los almacenes El Encanto de La Habana. También fueron derruidos en la plaza del Duque y en la misma época el palacio de los Cabalieri, el teatro del Duque y el Hotel Venecia, con lo que este popular sitio sevillano perdió todos sus edificios históricos, en lamentable detrimento del patrimonio artístico de la ciudad.


Los Almacenes del Duque. Tomado de Estampas de Sevilla, JDA.
Los Almacenes del Duque. Tomado de Esta


El marqués de Palomares de Duero nació en 1819 en Santiago de Cuba, donde se había establecido su padre, Antonio Vinent Ferrer, cuando llegó de Menorca en 1805. Éste era natural de la Real Villa de San Carlos, luego llamada Villacarlos y hoy Es Castell,  en la bocana del puerto de Mahón, uno de los mejores puertos de aguas profundas del mundo. El apellido Vinent, de origen catalán, es conocido en Menorca desde finales del siglo XVI, en que Pere Vinent sirvió como soldado en el castillo de San Felipe, que defendía dicho puerto. La familia Vinent Ferrer pertenece a una de las diversas ramas menorquinas de los Vinent, que han dado muchos hombres de mar, como pilotos, patronos, comerciantes del mar, constructores y armadores, entre otros. Antonio Vinent Ferrer tuvo al menos cinco hermanos, Juan, Fernando, José, Francisca y Joaquín.  Su abuelo materno, Juan Ferrer, de origen ibicenco, había sido piloto práctico en el puerto de Mahón y participó en el difícil traslado marítimo de los jesuitas catalanes a Italia, cuando fueron expulsados de España durante el reinado de Carlos III; su tío Juan, hermano de su madre y natural de Villa Carlos, fue el primer piloto de carrera del puerto de Mahón (1777), y estuvo embarcado con Vicente Tofiño en su expedición cartográfica para el Atlas Hidrográfico de España, siendo nombrado capitán del puerto de Mahón en 1802; su hermano José Vinent Ferrer fue ayudante de la boca del puerto de Mahón; la mujer de éste, María Mercadal, era hija de un armador que se arruinó en 1793; su otro hermano Joaquín sería piloto del jabeque corsario “Beltrán de Lis”, construido en Mahón en 1823; y el marido de su hermana Francisca, Isidro Fábregues, también fue armador.


Es Castell (Villacarlos) es la población más oriental del archipiélago balear y fue  construida por los ingleses durante su segunda ocupación de Menorca (1763-1782), con el nombre de Georgetown (Vila Jordi  para sus moradores). Gran Bretaña había tomado la isla por primera vez en 1708, en plena Guerra de Sucesión española, para aprovechar el magnífico puerto de Mahón como base de su flota mediterránea; al acabar la guerra, Menorca pasó formalmente  a su dominio con el tratado de Utrech. El viejo castillo de San Felipe fue entonces rehabilitado por los ingleses, siendo demolida la población de su arrabal (S’Arrabal de Sant Felip), y construida en su lugar Georgetown, a poca distancia, para realojar a los cerca de 3000 habitantes que tenía, y edificar varios cuarteles para la guarnición.  El proyecto de todo ello y la dirección de las obras fueron del ingeniero militar escocés Patrick Mackellar, uno de los mejores ingenieros británicos de la Ilustración, con experiencia en la colonización de Nueva Escocia y con un destacado papel en los conflictos anglo-franceses de Nueva Francia, que resultó decisivo en la captura de la muy fortificada Quebec y  de Montreal, así como luego en el Caribe, donde dirigió el complejo asedio de Martinica y después, como primer jefe de ingenieros, la difícil toma de la fortaleza del Morro en el asalto británico de La Habana, que mereció un amplio reconocimiento en su país.


Plano del castillo de San Felipe y Georgetown, por F.A. Asiotti, 1782.




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6 comentarios:

  1. Interesantísimos, siempre que pasaba me llamaba la atención el nombre y provocaba mi curiosidad, hoy saciada. Gracias

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  2. Me alegro mucho. Espero continuar con la segunda parte, que se desarrollará en Cuba

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  3. Me ha llamado la atención que Zocueca sea una pedanía de Guarroman, cuando no es limítrofe. Sería más lógico que perteneciera a Bailén o Andújar.
    https://www.juntadeandalucia.es/institutodeestadisticaycartografia/sima/ficha.htm?mun=23039

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    Respuestas
    1. Efectivamente, no obstante Zocueca —antes llamada El Rumblar— fue una de las Nuevas Poblaciones fundadas en el siglo XVIII durante la colonización de Sierra Morena, como Santa Elena, La Carolina, Carboneros y Guarromán, entre otras, pero no Bailén ni Andújar que son mucho más antiguas, y dado que el asentamiento de El Rumblar no pudo prosperar por falta de colonos, su término fue agregado al de Guarromán, que era la fundación colonial más próxima, para no perder las ventajas del Fuero de Población. Zocueca es, por lo tanto, un enclave municipal.

      Sobre enclaves

      https://es.wikipedia.org/wiki/Enclave

      https://es.wikipedia.org/wiki/Enclaves_de_Espa%C3%B1a

      Sobre pedanía de Zocueca

      https://ondabailen.es/2018/04/18/la-aldea-de-zocueca-pedania-de-guarroman-organiza-un-acto-entorno-a-pablo-de-olavide/

      http://www.prodecan.es/contenidos_general.php?anid=53

      https://es.wikipedia.org/wiki/Guarrom%C3%A1n#Localidades_que_pertenecen_a_Guarrom%C3%A1n

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  4. Hoy mismo nos llamaba la atención el sigular nombre que aparecía en la cartelería de la autovia A4. Gracias por la información, nos has posibilitado una grata conversación a mi compañero y de viaje y a servidor. Un saludo.

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